Rencor

Cada lágrima que se tragan mis ojos

entra directa en mi alma,

y tú haces mal en conservar la calma,

ya no aguanto tus enojos,

ni estupideces varias.

Acabaré contigo lentamente,

por todas las espinas que has clavado

en lo más profundo de mi mente

y que ya me han desquiciado.

Vas a suplicar clemencia,

pero no la tendré contigo,

malgastaste mi paciencia.

ahora, seré yo tu castigo.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s